Agrality es una compañía argentina dedicada a prestar servicios de producción de semillas híbridas, principalmente de maíz y girasol. Desde su fundación en 2016, ha experimentado un importante crecimiento en su área de operaciones, llegando a abarcar una superficie de alrededor de 7.500 hectáreas durante la campaña 2022/23, lo que supone un incremento del 50% con respecto al año anterior y más del 100% en comparación con la campaña 2020/21.

Agrality opera con una buena distribución geográfica, desarrollando sus actividades de producción en la zona núcleo, dentro las provincias de Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe, así como también en la zona noroeste de Argentina.

Desde 2020, es parte de la cartera de Bioceres Tech Services, brazo del Grupo Bioceres dedicado a servicios de I+D (investigación y desarrollo) y producción de semillas de alta calidad. Más concretamente Bioceres es dueña del 50% de la firma y el 50% restante está en manos de Juan Cruz Lizarralde, socio fundador y CEO de la compañía.

 

Tiene actividades de campo, planta, invernáculos y laboratorios, dedicados no solo a las semillas sino también a proyectos biotecnológicos, insumos biológicos, soluciones de nutrición y protección de cultivos, así como también en la cadena de abastecimiento, mediante soluciones de producción de semillas pre-comerciales y comerciales.

Con operaciones en Argentina, Brasil y Estados Unidos, Agrality ofrece a otras empresas “una solución integral, permitiendo la llegada de sus productos al mercado y la aceleración de los ciclos productivos”.  La firma presta sus servicios principalmente a las filiales locales de los principales desarrolladores y comercializadores de semillas a nivel mundial. Entre ellos se destacan Bayer, Corteva y Syngenta.

Los ingresos de la compañía están fuertemente concentrados, dado que cerca de un 75% de las ventas provienen de contratos con sus principales clientes.  A su vez, la compañía opera 100% bajo contratos que tienen una duración de entre 2 y 3 años donde se fijan las hectáreas a producir y los precios que, de forma predeterminada, varían en función de la producción obtenida, por lo que parte del riesgo de producción es compartido con sus clientes, lo que baja la variabilidad en los ingresos y otorga mayor previsibilidad.

 

Agrality opera con cuatro modalidades de contratos:

 

  • Precomerciales: que consiste en la primera producción de las semillas básicas, que luego van a servir de insumo para la producción comercial. Es una producción intensiva en pocas hectáreas, que si bien tienen un precio promedio final por hectárea mayor, se requieren de más recursos, entre personal y maquinarias propias.
  • En segunda instancia, full Grower: corresponde sólo a la reproducción en campo, con entrega de lo producido en la planta del cliente. Las ventas bajo este contrato generalmente se cierran en febrero o marzo, los cobros son más frecuentes pero posee el más bajo precio de venta por hectárea.
  • En tercer lugar, seco y desgranado: implica el proceso en campo más la utilización de la planta, donde se hace el secado, clasificación del grano y desgranado, que es el primer estadío del proceso industrial. Este contrato involucra más procesos, con entregas que se hacen de marzo a mayo.
  • Por último, tolling: abarca todo el proceso desde la producción hasta la bolsa terminada. Las entregas generalmente se hacen de julio a agosto e involucra mayores riesgos dado el deterioro que puede sufrir el grano hasta la entrega.

Una de las características que destacan desde la propia firma es que incrementó fuertemente el nivel de inversiones, las cuales han representado más del 5% de las ventas los últimos años, lo que le ha significado poder dar cumplimiento con sus contratos, y poder obtener renovaciones.

Durante los últimos años, Agrality realizó importantes adquisiciones en equipamiento de siembra, de aplicaciones, sistemas de riego, despanojadoras y cosechadoras, con el objetivo de mejorar y optimizar sus procesos productivos. En este marco, en 2020, adquirió la planta semillera La Ballenera que era propiedad de Syngenta y por la que pagó un total de 4 millones de dólares, abonados en tres cuotas. En tanto, actualmente, se encuentra en el proceso de ampliación de esta planta, con una inversión en el orden de los 5 millones de dólares.

Desde su fundación, Agrality ha conseguido posicionarse rápidamente como el segundo mayor prestador de servicios de producción se semillas, detrás del principal jugador del mercado, Satus Ager. De la producción de semillas de maíz, estimada en unas 70 mil hectáreas, cerca del 60% es realizado íntegramente por las compañías desarrolladoras y comercializadoras, específicamente Bayer, Corteva y Syngenta. Del resto, un 21% es realizado por Satus Ager, mientras que un 9% corresponde a Agrality.

 

En cuanto a la producción de semillas de girasol, de un estimado de 16.500 toneladas anuales de producción, el mercado lo domina Syngenta, con un 43% correspondiente a producción propia, seguido por Satus Ager con un 18% y luego por Agrality con una participación del 12%.

 

En cuanto a su facturación, en su balance anual cerrado en 2022, sus ingresos fueron de poco más de 5.914,5 millones de pesos (a moneda constante) y su resultado neto ascendió a 664,4 millones. Un año antes sus ingresaron fueron de 3.000 millones, con un resultado neto de 407,9 millones.

 

 

Fuente: (Bichos de Campo)