El Gobierno busca incentivar la liquidación de divisas por medio del nuevo dólar
soja en medio de una profunda crisis política y económica.

En ese contexto, los productores rurales de Santa Fe manifestaron su rechazo y absoluto a dicho
programa. Según expresaron algunos sectores, se trata de “una política oficial que pretende acumular reservas y que, según los productores, no beneficia en absoluto al sector”.

Por el contrario, sostienen que la medida impacta negativamente en los precios al consumidor y distorsiona la realidad económica de ciertas actividades productivas, como la lechería, que quedan excluidas de cualquier supuesto beneficio.

En esa línea, la Confederación de Asociaciones Rurales de Santa Fe emitió un comunicado en el que denuncia “la falta de explicaciones lógicas en las medidas aplicadas por el Ministerio de Economía y su carácter totalmente arbitrario, con el objetivo recaudatorio como única motivación. La entidad presidida por Sara Gardiol
sostiene que estas medidas producen distorsiones en los mercados, desequilibrios y pérdidas en toda la producción primaria, perjudicando especialmente a aquellos que pagan servicios por arrendamiento en un contexto de sequía histórica”.

La confederación de productores advirtió además “que la producción se encuentra en estado desesperante y necesita acompañamiento para su continuidad.

En este sentido, las medidas del Gobierno generan profundos desequilibrios y mayores pérdidas, afectando gravemente también a los consumidores, que deben pagar mayores precios por los alimentos”.

Por último, los productores señalaron también que no liquidan sus existencias de granos al ver cómo los llamados dólares alternativos suben cada día más, quedando en evidencia lo exiguo del valor fijado por el Gobierno.
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