Pertenece a la cabaña familiar La Matilda, de Maciá. A Los Martínez, sus dueños, les “explota el corazón” de alegría.
En agosto de 2020, en la cabaña La Matilde de ganado Braford, en Maciá, Entre Ríos, nació una vaca a la que un tiempo después bautizarían Lagunita porque cuando la bañaban, “de lo ancha que es, se le juntaba agua en el lomo”, cuenta Jerónimo Martínez, tercera generación de ganaderos, quien junto a su padre, Héctor Felipe, llevan adelante la empresa agropecuaria familiar.
Esta semana, tres meses antes de cumplir los tres años, con 660 kilos, preñada y con su hermoso ternero de cinco meses al pie, Lagunita se alzó con el premio mayor en la Exposición Nacional de la raza que se realizó en Corrientes: el Gran Campeón Hembra.
Cuando anunciaron a la vaca ganadora, gritaron, se abrazaron y lloraron de alegría juntos. “Realmente me explotaba el corazón. Si bien le teníamos fe a nuestra vaca, lo veíamos como una ilusión, pero se nos dio y realmente lo estamos disfrutando porque somos gente de laburo, somos una cabaña familiar, no tenemos el presupuesto de otras cabañas grandes”, dice Héctor. “Todavía no puedo creerlo, casi me desmayo. La vaca salió Tercer Mejor Vaquillona en el Mundial Braford de 2022 y la seguimos porque nos gustaba mucho y bueno, acá se nos dio”, agrega Jerónimo.
“Todos venimos con la ilusión de ganar, había muy buenos animales, todos tenían mucho mérito para ganar, todos tenemos vacas muy similares, pero era el día de nosotros”, señala Héctor.
Los Martínez son de Nogoyá y en el campo hacen ciclo completo: cría, recría y engorde de novillos para exportación. Hace algo más de ocho años decidieron embarcarse también en la genética bovina y armar su propia cabaña de raza Braford que hoy cuenta con cerca de 300 madres.
Todo comenzó con 100 buenas vacas. “En nuestros inicios, estuvo con nosotros el veterinario Yamil González, de Mercedes, él nos acompañó y nos ayudó a elegir y comprar las primeras vacas para que arrancáramos, porque nosotros no estábamos en condiciones de tener un genetista”, repasa Héctor.
Más adelante, fueron seleccionando de distintos establecimientos y Alejandro Lauret, de cabaña La Dominga, de donde proviene la base de la genética de las vacas de los Martínez, les “dio una gran mano”.
Después, como necesitaban a alguien que los guíe en la selección de los animales, lo contrataron a Cristian Vázquez, quien actualmente es el asesor en genética de La Matilde.
“Somos poquitos y hacemos de todo porque no podemos tener especialistas pero contamos con la colaboración de Francisco Walker, un nutricionista, y acá también está Juancito, nuestro cabañero, con quien ya lloramos un rato juntos”, destaca Héctor.
Entre los objetivo que persiguen en La Matilde para la raza Braford están la funcionalidad y la facilidad de parto. “Producimos y comercializamos embriones; el año pasado vendimos un toro campeón a un centro de inseminación, el CIALE, se llama Zupay; y ya teníamos otro toro en el CIAVT”, detalla Jerónimo.
En 2021 participaron por primera vez en una Exposición Nacional. “Ahí sacamos nuestro primer premio, el Gran Campeón Conjunto, Mejor Ternero y Mejor Ternera de Conjunto”, repasa. El año pasado, en el Mundial Braford obtuvieron los Grandes Campeones de Conjunto. Y en la actual Nacional de Corrientes, se quedaron con el Gran Campeón Conjunto y el Reservado Campeón Individual, además del Gran Campeón con Lagunita.
“Ella es una vaca con un frame mediano que es más o menos lo que buscaba la Asociación Braford, con mucha carne, mucha área de ojo de bife, un excelente ternero, y está preñada, se le daban muchas condiciones de madre, aparte de que, por era muy buena la vaca”, enumera Héctor. Según cuenta, por su edad, a Lagunita ya se le termina la carrera de exposiciones pero “¡no se vende, no, no no!”, afirma. “¡Imaginate lo que es ella para nosotros! La vamos a tener entre algodones”, confiesa.
“Estamos felices con lo que logramos, esto nos da mucho aliento para seguir, no cabemos de la felicidad”, concluye Héctor con una enorme sonrisa y los ojos vidriosos de emoción.