La Bolsa de Cereales de Buenos Aires estimó que la cosecha del cereal se ubicará en 2,7 millones de toneladas. Si bien queda por cosechar un 70% del área, advirtió que los rindes no repuntarán.
El sorgo tampoco consiguió escapar al impacto de la falta de agua y si bien es un cultivo que soporta las condiciones de seca, perderá terreno.
Según la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA), la cosecha del cereal avanzó en un 30% de la superficie total, con un rinde promedio a nivel nacional de 3.110 kilos por hectárea.
“Las productividades continúan ubicándose por debajo de las expectativas iniciales producto del déficit hídrico relevado en buena parte de los cuadros del cereal”, señalaron desde la entidad. Ante este escenario, ajustaron la proyección de cosecha en 2,7 millones de toneladas, un 22,8% con respecto a las 3,5 millones de toneladas del ciclo previo
Si bien quedan por recolectar el 70 % de los lotes de sorgo, las expectativas de rinde se alejan de los promedios en todo el país. La combinación de siembras más tardías a lo habitual, un marcado déficit hídrico durante el período de definición de rinde y las heladas tempranas se combinaron para darle un mazazo a la productividad.
EL REGIMEN DE PRECIPITACIONES
En buena parte de la campaña, las lluvias se ubicaron debajo de los valores normales en sectores de las principales provincias productoras, como Santa Fe, Entre Ríos y Buenos Aires.
“A pesar de promediar el otoño, se reportan cuadros transitando el llenado de granos y graves problemas de heterogeneidad en la madurez, producto de brotaciones y panojamiento secuencial en los cuadros”, señalaron.
Hacia el centro y este entrerriano se lograron recolectar el 58 % del área apta con rindes heterogéneos. En el oeste y centro de Buenos Aires, norte de La Pampa y Cuenca del Salado, la cosecha se concentra sobre los planteos sembrados en noviembre.