En las vastas llanuras argentinas, donde el eco de los ideales revolucionarios aún resuena, se gesta una nueva gesta, una gesta que entrelaza los hitos de la Revolución de Mayo con la (Re)evolución del agro argentino.

Este extenso territorio, testigo de incontables transformaciones a lo largo de la historia, ahora presencia el surgimiento de una nueva era, donde la tecnología y la innovación se convierten en los motores de un cambio sin precedentes en la forma en que se cultiva la tierra y se cría el ganado.

En el año 1810, mientras las calles de Buenos Aires se llenaban con los clamores de libertad y autodeterminación, en los campos argentinos se libraba otra batalla, más silenciosa pero igual de trascendental.

Los productores agrícolas de aquella época, al igual que los patriotas de la ciudad, anhelaban un cambio, una forma más eficiente y rentable de trabajar la tierra.

Hoy, más de dos siglos después, esos mismos anhelos se reflejan en la adopción acelerada de las Agtech, las tecnologías de agricultura y ganadería, que están redefiniendo por completo el panorama del agro argentino.

Las Agtech representan un conjunto de tecnologías que abarcan desde la biotecnología hasta la inteligencia artificial, pasando por el blockchain y la agricultura de precisión. Estas herramientas, antes reservadas para los laboratorios y las industrias de alta tecnología, ahora están al alcance de los agricultores argentinos, quienes las utilizan para aumentar la productividad, optimizar los procesos y reducir los impactos ambientales de su actividad.

La agricultura de precisión, por ejemplo, permite a los productores mapear sus campos con una precisión milimétrica, identificando áreas de bajo rendimiento o de estrés vegetal y aplicando los insumos de manera más eficiente.

Los drones y los satélites, por su parte, proporcionan imágenes de alta resolución que permiten monitorear el estado de los cultivos y prevenir enfermedades o plagas antes de que se propaguen. Y el blockchain, esa tecnología de registro distribuido, ofrece transparencia y trazabilidad en toda la cadena de suministro, desde la siembra hasta la venta final.

Pero más allá de las tecnologías en sí, lo que realmente está impulsando esta (re)evolución del agro argentino es el cambio cultural que están generando.

Los agricultores ya no son solo hombres de campo, sino también expertos en datos y analistas de sistemas.

La educación y la capacitación en tecnología se han vuelto fundamentales, tanto para los productores como para los trabajadores del sector, y cada vez más instituciones académicas y empresas privadas están ofreciendo programas de formación especializados en Agtech.

El caso emblemático es la Tecnicatura superior en nuevas tecnologías aplicadas al agro del Instituto Superior Politécnico Córdoba del Ministerio de Educación de Córdoba, una propuesta innovativa, disruptiva, publica, gratuita con título oficial de alcance nacional y única en su tipo en el país.

El futuro es hoy en el agro argentino.

La (Re)evolución que se gesta en los campos de nuestro país no solo está redefiniendo la forma en que se produce alimentos, sino también la forma en que se piensa y se vive el campo.

La Revolución de Mayo marcó el inicio de una nueva era en la historia argentina, y ahora, más de dos siglos después, asistimos al surgimiento de una nueva gesta, una gesta tecnológica que está transformando para siempre la forma en que interactuamos con la tierra y los recursos naturales que nos brinda.

En este nuevo capítulo de nuestra historia, las Agtech se erigen como los nuevos héroes, las herramientas que nos permitirán enfrentar los desafíos del siglo XXI y construir un futuro más próspero y sostenible para todos. Pero este futuro solo será posible si somos capaces de abrazar el cambio, de dejar atrás las viejas prácticas y abrirnos a nuevas formas de pensar y de trabajar. La (Re)evolución del agro argentino está en marcha, y el destino de nuestro país está en nuestras manos.

La Revolución de Mayo marcó un hito en la historia argentina, siendo un símbolo de lucha por la libertad y la autonomía. La incorporación de las Agtech en el agro argentino representa un nuevo capítulo en esta historia, donde la tecnología y el conocimiento se convierten en las herramientas fundamentales para el desarrollo y la prosperidad del país.

La convergencia entre la Revolución de Mayo y la (Re)evolución del agro argentino a través de las Agtech marca un hito trascendental en la historia del país. En un contexto donde la tecnología y la innovación son los pilares del progreso, los agricultores argentinos se han convertido en protagonistas de una gesta tecnológica que redefine la forma en que se cultiva la tierra y se cría el ganado.

Con la adopción acelerada de las Agtech, desde la agricultura de precisión hasta el blockchain, se ha abierto un nuevo horizonte de posibilidades para aumentar la productividad, optimizar los procesos y reducir los impactos ambientales de la actividad agropecuaria. Más allá de las herramientas tecnológicas, esta (re)evolución implica un cambio cultural profundo, donde la educación y la capacitación en tecnología se han vuelto fundamentales para enfrentar los desafíos del siglo XXI. Así, las Agtech se erigen como los nuevos héroes de la agricultura argentina, impulsando un futuro más próspero y sostenible para todos los habitantes del país.

La (Re)evolución del agro argentino está en marcha, y el destino de la nación está en manos de quienes sean capaces de abrazar el cambio y abrirse a nuevas formas de pensar y de trabajar.

Ab. Prof. Pablo Andrés Figueroa